PREGUNTA 3.- ¿Está usted de acuerdo con enmendar la Constitución de la República del Ecuador para reestructurar al Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, así como dar por terminado el periodo constitucional de sus actuales miembros, y que el Consejo que asuma transitoriamente sus funciones tenga la potestad de evaluar el desempeño de las autoridades cuya designación le corresponde, pudiendo, de ser el caso, anticipar la terminación de sus periodos, de acuerdo al Anexo 3?
La Constitución de la Repùblica del Ecuador (artículo 204) establece que los ciudadanos son el principal grupo fiscalizador del poder público y, por ende, su participaciòn activa en los procesos de elección de dignidades y ejercicio de dicho poder es fundamental. Es por eso que es fundamental que la formación del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social sea imparcial e íntegra.
Los miembros de este consejo representan de forma directa a la sociedad civil en el ámbito público y son un mecanismo importante en el sistema de pesos y contrapesos. Por lo tanto, sus acciones deben ser transparentes y a favor del beneficio social, no de unos pocos y menos de los políticos de turno.
El artículo 208 de la Constitución de la República del Ecuador establece que el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social es el ente encargado de “investigar denuncias sobre actos u omisiones que afecten a la participación ciudadana o generen corrupción”. Por este motivo, es esencial que los miembros del Consejo actúen de forma independiente y estén absolutamente desvinculados del poder ejecutivo. Este es un aspecto importante para mitigar los daños causados por los actos de corrupción recientes y evitar nuevos actos de corrupción.
Ecuador necesita fortalecer sus instituciones democráticas y garantizar los derechos de sus ciudadanos. Así como es importante que los ecuatorianos puedan participar y vincularse dentro de la vida política y tener libertad para expresarse, también lo es que puedan ser observadores de la administración pública. Para eso se requiere de procesos de veeduría transparentes dentro de las entidades públicas, en particular en la administración de la justicia y su aplicación. Reestructurar el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social con ciudadanos que estén comprometidos con un cambio real en la institucionalidad del estado y su manejo interno garantizará que la fiscalización ciudadana sea efectiva.
El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social ha sido, por mucho tiempo, una artimaña más del poder ejecutivo para manipular a su antojo las demás funciones del estado y tener poder sobre sus instituciones. Sin embargo, si el proceso de elección respeta la norma y la voluntad del pueblo ecuatoriano, el poder ciudadano será sin duda un elemento fundamental para la lucha contra la corrupción y para velar por los intereses de los ecuatorianos.
Es el deber de cada ciudadano cambiar la realidad del país y empezar a construir un estado de derecho, democrático y transparente. Votar SÍ en esta pregunta permitirá reestructurar las bases institucionales con procesos que no solo estarán establecidos en la Constitución y demás leyes vigentes, sino que serán legítimos