Mayor parte de nuevo crédito con FMI irá a sueldos de funcionarios y deudas del Estado
El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó por unanimidad el 30 de septiembre del 2020, un nuevo acuerdo económico por $6.500 millones hasta el 2022 para Ecuador, a 10 años plazo y a una tasa de interés de 2,9%.
El préstamo estaría atado a un plan que apuntala varias metas fiscales y, conforme se cumplan estos objetivos, el FMI realizaría los desembolsos pactados de manera trimestral.
Entre los compromisos enmarcados en la “carta de intención”, están:
1. “Transparencia y lucha contra la corrupción”: mejorar la transparencia en la administración pública, adoptar una legislación anticorrupción antes de culminar el año y realizar la entrega apropiada de datos fiscales por parte de entidades del sector público;
2. “Para proteger la dolarización”: presentar reformas legales para promover la autonomía del Banco Central (BCE), además de monitorear el riesgo crediticio y supervisar la gestión de instituciones financieras;
3. “Para alcanzar la sostenibilidad en las cuentas fiscales”: Implementar una reforma tributaria progresiva a mediano plazo y medidas de reducción de gasto público, en ese sentido, la deuda pública debe volver al tope del 57% en relación al PIB para finales de 2025.
La reforma tributaria, más concretamente, plantea: aumentar el IVA al 15%; eliminar la devolución del IVA a los adultos mayores; gravar el décimo tercer y décimo cuarto sueldo con impuesto a la renta; establecer un impuesto a la gasolina; establecer un impuesto a emisiones de CO2 y aumentar la base del impuesto a las telecomunicaciones.
Por su parte, el presidente Lenin Moreno, a través de una cadena nacional la noche del domingo 4 de octubre, señalo que no ha sido voluntad de su gobierno retrasar el pago a proveedores o a las instituciones que reciben recursos del Estado.
El primer mandatario puntualizó que, su administración, recibió un país sin fondos para atender contingencias. “¡Sin ahorros! ¡Sin un centavo para enfrentar una situación inesperada, adversa en todo sentido!” manifestó Moreno.
Además, indicó que el dinero del préstamo será destinado a los siguientes ámbitos:
1. Pago de los sueldos de servidores públicos,
2. Pago a 17.000 pequeños y medianos proveedores del Estado con quienes se tenga deudas de hasta $500 000,
3. Asignación de recursos a Centros de Desarrollo Infantil, Desarrollo Social y otros proyectos de inclusión social,
4. Transferencias para saldar deudas con 821 juntas parroquiales y abono a municipios medianos, grandes y provincias,
5. Pago de liquidaciones a más de 3.000 extrabajadores de empresas públicas,
6. Pago de compensaciones a jubilados del sector público,
7. Determinación de $300 millones para el programa de créditos Reactívate Ecuador.
En una economía en la que se estima una caída del PIB entre el 10% y el 11%, además de una reducción de ingresos estatales en $7.900 millones este año con respecto del anterior, Guillermo Avellán, director de investigación de Ecuador Libre, afirma que “el acuerdo con el FMI es necesario pero perfectible”.
Avellán argumenta que, el objetivo de la reforma tributaria “no debe ser únicamente aumentar la recaudación”, sino que, debería removerse también impuestos “distorsivos” con el fin de resolver la crisis de competitividad del país.
De igual manera, celebra la existencia de “apertura por parte del FMI para revisar los detalles del acuerdo con el próximo Gobierno”.
La investigadora del Cato Institute, Gabriela Calderón, menciona que “la evidencia reciente y de larga data indica que un nuevo rescate del FMI proveerá solamente oxígeno para postergar las reformas necesarias”.
Asimismo, recalca que, “lejos de celebrar el nuevo rescate del FMI, deberíamos exigir reformas”, puesto que no se puede esperar resultados distintos sin cambiar el rumbo económico del modelo insostenible de la Revolución Ciudadana.
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